jueves, 25 de abril de 2024
   
 
16/3/2016
     
La historia

El Gobierno logró hoy su primera victoria en el Congreso en 30 segundos. No demanda mas tiempo levantar la mano y votar de manera afirmativa. El camino hasta acá, sin embargo, fue mucho mas largo y empezó en Pinamar hace mas de dos meses.

    
      Salvo alguna turbulencia legal el pasado viernes luego del fallo de la Cámara de Nueva York, nunca corrió peligro la media sanción en Diputados del acuerdo con los holdouts. Siempre hubo tranquilidad respecto a los números para conseguir una victoria histórica para Cambiemos por dos causas principales:

                                     a) Primera vez para un partido que llego para interrumpir la alternancia bipartidista de radicales y peronistas

                                      b) Nunca antes un Gobierno estuvo tan limitado a nivel parlamentario. Yrigoyen, Alfonsín y De la Rúa fueron siempre minoría en el Senado pero con mayoría en Diputados. Macri no. Ni siquiera tiene el bloque mas numeroso. 

               Estos condicionamientos objetivos empezaron a ser perforados a partir de una calurosa noche de la primera quincena de enero en Pinamar. Convocó Sergio Massa y hubo dos asistentes. Juan Manuel Urtubey no llamó la atención porque estaba claro desde hace un tiempo que el salteño buscaba un espacio notoriamente poskirchnerista. El otro invitado fue Diego Bossio y su presencia resultó mas sorpresiva.  Hasta el 10 de diciembre fue  titular de la Anses y durante años un disciplinado soldado de la ex presidenta aunque siempre cómo líbero. Sin pertenencia expresa a ninguna tribu PJ.

            Allí nació la victoria de esta mañana. Los tres coincidieron en aspectos básicos:

                                             1) Se terminó el liderazgo hegemónico de CFK

                                              2) La conducción del peronismo no puede ser un coto privado de La Campora

                                              3) El rol opositor debe ser cumplido de manera conciente pero con una mirada particular sobre los intereses .de nuestros Gobernadores e intendentes que necesitan en muchos casos soluciones urgentes.


      A partir de este encuentro, rapidamente, Urtubey sumó diputados propios y vecinos que llegaron de Catamarca y Tucumán y Diego Bossio sumó viejos conocidos que hace mucho reclamaban mayor horizontalidad en la conduccion cómo el bonaerense Oscar Romero. Rapidamente conformaron un bloque cercano a lo 20 integrantes.  Sergio Massa, en tanto, tambien consolidó su estrategia. Aunque Macri se enoje, un palo y un terrón de azúcar. Respaldo a María Eugenia Vidal en la provincia pero reflotando el indice Congreso a nivel nacional incomodando al oficialismo cada quince dias con los problemáticos números de la inflación. El Frente Renovador reune desde diciembre mas de 40 diputados.

    Aquí está la explicación del triunfo de esta mañana. Que razonablemente no fue celebrado a instancias del radical  Mario Negri, ejemplo de  una ironia  y solidez parlamentaria que hoy no abunda en este Congreso del siglo XXl.  Bossio, Urtubey y Massa, juntos, representan mas de 60 diputados. Su posición política y su respaldo a la negociación con los Buitre fue decisiva. Sin su aporte Monzó y Massot  estaban en. 100 votos propios.

       Si la fractura de Bossio fue providencial para el oficialismo, a la inversa conformó un golpe tan duro para el FPV que todavía no se ha recuperado. Su estrategia post derrota electoral de diciembre era mantener la unidad y sumar a posibles desencantados del massismo cómo Felipe Solá, Facundo Moyano y otros.  Se imaginaron un bloque con mas de cien diputados en algunas votaciones y el presente es menos venturoso. Solo ochenta y con posibles nuevas deserciones de tucumanos y entrerrianos.

     Es cierto que no hay nada para celebrar en esta busqueda de un acuerdo con los Buitre, pero el camino recorrido por Cambiemos para llegar a este resultado fue inteligente y trabajoso. Se ha elogiado su amplitud para aceptar modificaciones y es cierto, pero también es verdad que no tenía demasiadas opciones: cerrarse y no buscar puntos de coincidencia significaba fracasar.

      El buen resultado de esta mañana no oculta tampoco otra realidad. El presente, con coincidencias claves con Massa, Urtubey y Bossio, no se repetirá de manera automática. Cada nuevo proyecto requerirá siempre de una ingeniería  creativa y de coyuntura.