jueves, 25 de abril de 2024
   
 
28/5/2015
     
Perfume

Baqueanos del peronismo bonaerense olfatean unidad. Ya se bajaron Bossio, Insaurralde, Mussi y otros. Fernández, Dominguez, Berni y Espinoza siguen en carrera pero la decisión final es de la Presidenta.

   No hay nada resuelto, pero varios intendentes, diputados y dirigentes gremiales del PJ intuyen que podría haber alguna salida política que evite las primarias en la provincia. Hasta aquí ha ocurrido lo previsible, incluída la decisión de ayer del intendente de Lomas. Sus aspiraciones, mas allá de medir de manera interesante, no tenían destino. Estaba claro que no había marcha atrás después de tanta proximidad con Sergio Massa.

   Entre los cuatro que siguen en carrera hay dos subgrupos bien diferenciados: Julián Dominguez - Aníbal Fernández por un lado y Fernando Espinoza - Sergio Berni por el otro. 

    El jefe politico de La Matanza tiene votos propios -eso significa mucho- y una relación muy cercana con el Gobernador. Berni es portador de una dualidad singular: hombre directamente de CFK desde los tiempos de Santa Cruz pero también el mejor interlocutor que tuvo Scioli por el tema Seguridad con el Gobierno Nacional. Sin embargo, nadie imagina a ninguno de los dos cómo el futuro heredero de Dardo Rocha.

    Fernández y Dominguez son otra cosa. El primero se ha planteado directamente cómo el sucesor de Daniel Scioli y no parece una señal menor que la Presidenta haya convalidado la pelea en el territorio de su Jefe de Gabinete. Dominguez también tiene herramientas importantes. Carlos Kunkel , Diana Conti y la gran mayoría de diputados bonaerenses dijeron que es su candidato. Lo mismo sindicalistas de peso cómo Antonio Caló y Ricardo Pignanelli. La semana pasada lo eligió cómo referente el "Barba" Gutiérrez, intendente de Quilmes  enfrentado con Aníbal y el martes le comunicó su alineamiento el marplatense Gustavo Pulti.

    Mas allá de estos posicionamientos, la alternativa de una interna  en la provincia no tiene el peso político de una primaria en todo el país.  La PASO nacional  es indispensable. Daniel Scioli es el que mejor tracciona el voto peronista clásico y Randazzo el destinatario de la elección mas  kirchnerista. Los votos de ambos quedarán sumados bajo la sigla común del FPV y así apuestan a superar  lo recogido por Macri mas Sánz y Carrió. 

    En Provincia es otra cosa. Dominguez y Fernández no representan electorados antagónicos y  el peso propio de los candidatos a la Go bernación se relativiza por el escaso corte de boleta histórico en el distrito: 3 %.  El candidato a presidente es el que tira para arriba, no hay casi perspectivas para un aspirante a gobernador sin una cabeza de lista competitiva.

    Por aquí pasa la cuestión. Si desde lo electoral no cambia demasiado un apellido u otro, tiene sentido la primaria?  Para algunos puede servir para legitimar liderazgos, pero también es verdad  que una lista de unidad ordenaría con mucha mas prontitud cualquier pelea de cacicazgos en el conurbano. 

  CFK no dijo todavía una palabra sobre esta posibilidad pero algunas señales hay: Recurrentes pedidos a  los principales interesados para que no escale ninguna dureza declarativa. La semana había empezado con algunas chicanas mutuas entre el Presidente de la Cámara de Diputados y el Jefe de Ministros pero  todo se calmó rápido.

   Mañana y el fin de semana los dos tienen presentaciones varias en TV y distintos actos. Dominguez buscando  mayor nivel de conocimiento y  Fernández hacer crecer su estructura  y cadena de apoyos. Ninguno se detiene, pero también es verdad que en ambos campamentos no descartan que puede haber novedades antes del próximo 20 de junio. Cristina decide.