jueves, 25 de abril de 2024
   
 
10/3/2015
     
¿Hay Límites?

Tiene reglas de juego la pelea Scioli-Randazzo? Hasta aqui no las fijo nadie. Escalada de agravios y una duda sin responder: Quién ordena la pelea por la candidatura presidencial desde ahora hasta agosto?

 
      Randazzo fue el primero. Dijo que "Scioli es lo mismo que Massa y Macri, tiene el discurso de los medios dominantes". Le respondió Alberto Pérez: "Que deje de colgarse de las polleras de la Presidenta. Nunca ganó ninguna elección". Otro sciolista, Alberto De Fazio, le recordó la mención en Argenleaks, donde según la Embajada Americana  tenía un discurso crítico de la oposición en el conflcto por la 125 pero para adentro reconocía que el gobierno debía dialogar con las partes  y buscar un acuerdo.

  Primer dato de la pelea. Sin haber ningún gesto oficial está claro que la disputa posiciona claramente al Ministro del Interior como el adversario oficial en la primaria contra el Gobernador de Buenos Aires. Es razonable que CFK no quiera   ministros, Gobernadores o diputados prontamente desencantados con el sueño de una candidatura, pero el choque Scioli - Randazzo no tiene nada de azaroso. En concordancia con esto, mas de una vez Carlos Zanini dijo de manera reservada que su apuesta era "por Florencio"

    El equipo naranja supo siempre que nadie le va a regalar nada y hasta entienden el respaldo al adversario. Que imaginan? Se piensan ganando la primaria con comodidad (6,5 a 3,5)  y negociando luego con los perdedores y obviamente con todo lo que reclame la propia Presidenta.

    Puede enrarecerse demasiado el clima? Es un posibilidad. La salida de Mazzon es una señal  y  que Gustavo Marangoni se haya quedado sin candidatura marcó otra instancia que pareció compleja.  Al operador histórico le facturan dos problemas: un pedido especial por un diputado mendocino que no fue satisfecho y la imposibilidad de un acuerdo macro en Santa Fe que posibilitara la candidatura de María Eugenia Bielsa. Seguro también  que hubo sospechas de demasiada cercanía con el bonaerense, pero esta claro  que el "Chueco" puede tener experiencia y oficio en su trabajo pero no hace magia. Congraciar hoy los intereses de los jefes provinciales y la  Presidenta en cada distrito suele ser muy insalubre. La declinación del titular del Banco Provincia tuvo mas peso mediático que político. Nadie en el perokirchnerismo porteño tiene una intención de voto atractivo, incluído el representante sciolista. Participara o no, el oficialismo no puede zafar de sus módicas aspiraciones en la Capital Federal.

     Hasta donde llegará el cristinismo en la disputa con Scioli? No se sabe. Cerca del Gobernador hay preocupación pero aportan otros elementos: "Habrá momento difíciles pero creemos y queremos que haya límites. En Santa Cruz con Peralta hubo situaciones de tensión pero nunca nada se salió del cauce. No solo hay una elección, también hay una provincia que tiene que seguir siendo administrada"

     El rol de Scioli a nivel nacional tampoco resulta indiferente. Nadie entre sus pares cuestiona hoy el liderazgo de la Presidenta, pero también es cierto que el bonaerense tiene mucho mas consenso que cualquiera otro para anotarse en la carrera de la sucesión. Los gobernadores no estarán  cómodos si crece la belicosidad desde Balcarce 50.

      El Gobierno nacional confronta porque cree que puede  ganarle a Scioli de la mano de un  cristinista puro o solo pretende marcarle la cancha? No hay unanimidad. Para muchos es una candidatura irreversible. Los menos creen que hay espacio para construir otra cosa.