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jueves, 28 de marzo de 2024 |
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¿Se explica?
Nadie esperaba esta mañana el rotundo giro de CFK en el análisis de la muerte de Nisman. Cuando dijo "El suicidio -que estoy convencida- no fue suicidio" comenzó a escribirse otra historia. Advertencias y posibles medidas.
Primera consideración sobre el tema: Absolutamente nadie esperaba ese tipo de mensaje de la Presidente. Ninguno de los funcionarios que balbuceó alguna ratificación conocía algo previamente. Los periodistas tampoco. Básicamente hubo que chequear y y reconfirmar mucho. El material no llegaba por el camino indubitable de una cadena oficial sino a través de diversos tweets y un texto que se pudo imprimir un rato mas tarde. Era la Presidenta la que hablaba o la historia también tenía ahora una cuenta hackeada?
La carta fue escrita en los primeros minutos de hoy jueves puesto que ya demuestra conocer la información que da Raul Kollman sobre el testigo Lagomarsino. Y el primer análisis es estrictamente político. CFK considera que su Gobierno es el único y principal damnificado de la muerte de Nisman. Y lo explica: No alcanzó con el dictamen, tenía que morir para que el daño sobre el Ejecutivo fuese notorio y decisivo.
Puede ser una especulación posible. Mas aún, es cierto que el gobierno esta confundido, conmocionado y sin respuestas. Pero es necesario una afirmación de este tipo de la propia Presidenta cuando la Fiscal Fein sostuvo y sostiene que "descarta la presencia de terceros"? Recordar el caso de Lourdes Di Natale, cerrado con una dudosa carátula de "suicidio" también por la doctora Palmighiani, es una advertencia? Difícil leerlo de otro modo.
Cuál era la diferencia de explicar que en la muerte de Nisman siempre el único que paga los costos es el Gobierno, mas allá de sus formas, y esta decisión de anunciar públicamente que está convencida de un asesinato? Casi un sincericidio. Si se constata que lo mataron, las responsablidades del e Estado parecen ser mucho mayores: La custodia es de la Policía Federal, el barrio está controlado por Prefectura Nacional y el testigo Lagomarsino le acercó un arma contrariando todos los principales protocolos de seguridad.
La otra cuestión es la reputación de los propios. Cómo queda parado Sergio Berni luego de defender desde el domingo a la noche la teoría del suicidio? De mínima cómo ineficiente: No constató la existencia de una tercera puerta, fue confuso con los horarios de llegada de las ambulancias del SAME y Swiss Medical y se peleó con quienes planteaban dudas razonables.
El cambio de opinión , mas allá de su radicalidad, puede ser legítimo. Habrá que ver si sobrevienen cambios en consecuencia. Desde Tribunales, al mediodía, esperaban novedades en la custodia de Nisman (tema clave si fue homicidio) y el Ministerio de Seguridad.
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