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| miércoles, 24 de abril de 2024 |
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"El lunes decido"
Tomás Bulat le dijo ayer a la conducción del massismo que el próximo 29 define si acepta o no la propuesta de ser candidato a Jefe de Gobierno en octubre. Ninguna situación es demasiado cómoda para el Frente Renovador en un distrito clave cómo la Capital Federal.
Hace rato que la falta de nombres de peso en el segundo distrito electoral del país es un problema. Roberto Lavagna fue la primera apuesta y hubo por lo menos dos intentos firmes por convencerlo que siempre terminaros en negativas contundentes. La posibilidad de algún acuerdo conjunto con Graciela Ocaña nunca avanzó demasiado y el intento de ensayar con Guillermo Nielsen se acotó a su próxima postulación cómo diputado. Ahora es el turno de Tomás Bulat, y tampoco esta demasiado firme esta alternativa.
Las razonables dudas del economista tienen el siguiente origen:
a) Ninguna medición lo señala cómo la posible gran sorpresa de las elecciones que vienen. No parte de ningún piso eventual demasiado alto y por lo tanto el crecimiento puede ser complejo y el techo no tan alto,
b) El escenario en la ciudad es decididamente adverso para cualquier opositor al macrismo. Se sabe que hoy gana con comodidad tanto con Gabriela Michetti cómo con Horacio Rodriguez Larreta. Martín Lousteau es además otro muy buen candidato y es sabido también que el kirchnerismo tiene siempre un voto cautivo que ronda el 20 %. Pregunta razonable de Bulat a sus convocantes: Por donde puedo colar mi propuesta en un esquema tan cerrado del panorama electoral?
Su aceptación resolverá parte del problema, pero hay una cuestión central que sigue pendiente en el Frente Renovador: Capital, Córdoba y Santa Fe son decisorias en materia electoral (Casi el 30 % del padrón electoral nacional) y en ninguna tiene todavía candidatos minimamente competitivos. El escenario porteño ya fue descripto; en Santa Fe todo se divide entre el oficialismo socialista-radical, Miguel Del Sel y el PJ; En Córdoba la pelea comprende a De la Sota y la avanzada alianza UCR-PRO.
Esta descripción tiene un agravante para la carrera de Massa. En los tres distritos no solo es magra su inserción sino que el macrismo, su principal competidor, es primera o segunda fuerza.
Retomando la cuestión local, Bulat ha dicho que dedicará estos dias a evaluar los posibles costos profesionales que la decisión de ser candidato puede implicar. Economista y docente de profesión sabe acertadamente que la adscripción a un partido puede conllevar cierto angostamiento de la oferta laboral. La otra instancia es que decline la oferta por la Jefatura de Gobierno - sabe que el objetivo hoy es inalcanzable- para dialogar sobre una eventual diputación.
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