jueves, 25 de abril de 2024
   
 
7/10/2014
     
Afuera

Gustavo Posse, en un mensaje que no parece sólo personal, dice que Martín Insaurralde no puede integrarse al Frente Renovador luego de votar con el oficialismo la Ley de Abastecimiento y otras.

       No había sido unívoca la posición de los massistas en torno al Diputado Nacional de Lomas de Zamora. Algunos cómo Darío Giustozzi lo castigaron con dureza diciendo que era socio de Amado Boudou  y otros cómo Joaquín  De la Torre le dieron una cálida bienvenida : " El objetivo es ganar el año que viene y si Martín nos ayuda está todo bien". Gustavo Posse fue en su momento solo informativo " Por lo que se, ya esta adentro". Y jugó  con la posibilidad de una fórmula compartida entre él cómo número uno e Insaurralde cómo dos.

      La historia hoy se ha modificado. Y no solo por Griesa y el default. El intendente de San Isidro dijo ayer que "No puede venir ahora con nosotros un diputado  que votó la Ley de Abstecimiento. La sociedad se va a dar cuenta sola cuando empiecen las confiscaciones en las empresas. Por otro lado, cual es la Renovación que proponemos si el candidato es él? Que tiene de cambio ?"

         El final de la historia, sin embargo, todavía no está escrito. Siempre pareció muy apurada la posibilidad de una incorporación fulminante de Insaurralde al massismo por dos cuestiones:

                                                                       a) El diputado no es un solitario en su vida política. Tiene detrás una estructura. Que hubiese pasado con todos ellos si por una decisión personalista de Insaurralde quedaban aislados del Gobierno nacional y provincial? Iban a estar mejor o peor?  Seguramente su opinión fue trasladada al particular interesado.

                                                                        b) Tenía sentido un cambio de este tipo cuando todavia no hay ninguna tendencia definitiva en materia electoral?

      La cuestión central a partir de ahora es saber que sucede con la figura política de Insaurralde. Tiene un muy alto grado de conocimiento y tal vez la mejor intención de voto de los eventuales precandidatos de la provincia, pero también es cierto que sus indefiniciones generaron incomodidad en las dos orillas. Lo de Posse es una clara prueba de ello.

       Si mantiene sus números dentro de seis meses, en el oficialismo le perdonarán casi todo. Y en el massismo también estarían dispuestos a dejar en el pasado algunos de los cuestionamientos de hoy. Mientras tanto Daniel Scioli se ha acercado muchísimo a la figura de Fernando Espinoza y  Diego Bossio sigue trajinando distritos.  En el Frente Renovador se alistan los de siempre pero con un perfil de menos exposición: Giustozzi, Solá y Posse.

      Hay espacio para una tercera alternativa? Parecería cómo muy complejo. Pero algunos indican que Martín Insaurralde, resistido por kirchneristas y masisstas más allá de ser un buen candidato, podria ser la principal atracción de una fuerza solo provincial.  La versión está. Que se concrete y sea competitiva es muy diferente.