sábado, 20 de abril de 2024
   
 
1/10/2014
     
Express

Cuánto es el tiempo adecuado para discutir una ley? Una semana, un mes, un año?

  Con poca originalidad, básicamente desde algunos medios, a cada proyecto que se debate últimamente en el Congreso se le asigna el título de express. Y no en términos elogiosos sino cómo sinónimo de trámite urgente y de voto sin discusión. Cómo en tantas cuestiones, el abuso del calificativo degrada su utilización. Nadie puede estar de acuerdo con ninguna votación a libro cerrado, pero tampoco parece razonable pretender invalidar cualquier votación que no se pudo modificar por falta de número propio

      Asi etiquetan hoy la posible aprobación del nuevo Código Civil, cuando la Bicameral abocada a su reforma se votó en noviembre del 2011. Pasaron casi tres años.  En ese tiempo hubo centenares de audiencias en todo el país, debates con la participación del propio presidente de la Corte,  de otra Suprema cómo Highton de Nolasco y de la muy reconocida Kamelmajer de Carlucci. La Cámara Iniciadora (Senadores) votó el nuevo Código el año pasado y recién ahora llega a Diputados. Tampoco es "express" el tratamiento de la Ley de Hidrocarburos. Pasaron cuatro largos meses de negociación entre el Estado Nacional y casi diez gobernadores de provincias petroleras y muchos enfrentamientos fuertes en el medio. Se puede decir que la Ley no convence, pero no que ha tenido un trámite apresurado. Son iguales todos los tratamientos parlamentarios? No, respecto a la Ley de Abastecimiento, por ejemplo, los reclamos sobre la brevedad de su discusión han sido mucho mas fundamentados

       Para la sesión de hoy, Código Civil, se han registrado objeciones muy atendibles. Algunas mas que otras. Elisa Carrió nunca consideró válida a la Bicameral para introducir modificaciones en el Código y siempre reclamó lo que hoy pide: Pase a Comisiones. Razonable, pero también es cierto que en su momento el pleno de la Comisión (incluídos oficialistas y opositores) rechazó el planteo de la chaqueña  y por ende el reclamo  aparece cómo  a destiempo. No ha sido la única queja. Mario Negri por la UCR y otros bloques apuntan que el dictamen original de la Bicameral fue modificado en el recinto de Senadores por modificaciones que introdujo Liliana Negre de Alonso y pretenden su revisión en Diputados. Comprensible, y habrá que ver si el oficialismo encuentra una adecuada respuesta desde la técnica parlamentaria y desde la política. Pero también es cierto lo otro, cómo nunca antes el Poder Judicial y el Poder Legislativo (oficialistas y opositores) buscaron consensuar un tratado de casi 5000 artículos logrando posiciones comunes en un muy alto porcentaje. Está claro que no ha habido unanimidad absoluta, pero no ha sido poco lo acordado y conseguido.