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jueves, 28 de marzo de 2024 |
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Final abierto
Ninguna precisión en torno al futuro de la policía municipal. Scioli delega en Mariotto. Granados es escéptico y los Senadores esperan no tener que convocar a Sergio Berni. Posible negociación con la UCR y el GEN tratando de lograr su aprobación en particular.
Daniel Scioli mira el medio vaso lleno y consideró que lo mejor de la sesión del miércoles en Senadores, donde el oficialismo no pudo votar en particular la ley de policías municipales, fue su aprobación en general .Señaló tener plena confianza en que Gabriel Mariotto pueda completar el objetivo del oficialismo la semana que viene. Los senadores del FPV también imaginan este final favorable pero hasta ahora no hay demasiadas explicaciones sobre cómo poder modificar la situación parlamentaria que llevó a la frustración de la última sesión. Mas llamativo en cambio resulta la posición de algunos allegados a Alejandro Granados que manifiestan tener escasa confianza en poder completar la aprobación de la ley. Si esto trasciende desde las cercanías del Ministro de Seguridad corresponde preguntar si en verdad está o no de acuerdo con la ley que se terminaría votando. En verdad, no resultaría extraño que no sienta demasiada comodidad con el proyecto. Por su historia está mucho mas cerca de la posición que han sostenido Mario Meoni, Gustavo Posse y Hugo Curto entre otros que del proyecto que se está votando en Senadores.
El jueves en La Plata también se había modificado sustancialmente el discurso en torno a Sergio Berni. En el momento del fracaso del miércoles se daba cómo un hecho que la semana que viene asumiría para aportarle un voto clave al bloque de Fioramonti. Esa posibilidad se fue diluyendo por dos motivos:
a) El propio Secretario de Seguridad de la Nación ha manifestado sus reparos con el proyecto que viene con media sanción de Diputados. No sería sencillo entonces que suspenda su prolongada licencia para votar una ley que no comparte en varios de sus artículos.
b) Nadie se imagina a Berni abandonando para siempre su cargo en el Ejecutivo Nacional sólo por tener que votar esta ley. Y asumir para luego pedir licencia otra vez podría resultar una desprolijidad demasiado grande y engorrosa desde lo legislativo.
Fuentes del bloque oficial indican que se trabaja para votar el proyecto en particular el próximo miércoles sin tener que recurrir in extremis a la convocatoria del Secretario. Apuntan a algún posible acuerdo con los tres radicales y el representante del Gen. Los cuatro votaron en general en contra y por lo tanto no resulta demasiado sencillo imaginar que puedan acompañar al oficialismo votando a favor en particular. De todos modos, algún camino en ese sentido han iniciado desde el bloque de Fioramonti.
En la inconclusa pelea por las policías municipales retorna el tema de siempre cuando se discute sobre seguridad: Mano dura o garantismo. Rico o Juan Pablo Cafiero, la política de Arslanian o la de Ruckauf.
Las fuerzas de seguridad de las comunas arrancó cómo una medida mas destinada a combatir contra el delito., pelea donde la bonaerense pierde mas de lo que gana. En la idea original Granados imaginó policias con mucha autonomía y respaldo político de los intendentes. Y hasta allí las coincidencias con Massa eran muchas.
El origen de los problemas fue el devenir de la ley en diputados, cuando Marcelo Saín, oficialista de Nuevo Encuentro y anterior titular de la Policía de Seguridad Aeroportuaria, profundizó un proyecto muy compartido por la gran mayoría de su bloque. En el mismo se establece que cómo ocurre en otras policias del mundo, el agente no debe portar el arma de la repartición las 24 hs. Si quiere utilizar un arma privada lo puede hacer, no la oficial. La explicación es que la mayoría de los efectivos son muertos cuando deben actuar fuera de su horario de servicio o identificados por los delincuentes en ómnibus o supermercados. También se lo acota mucho en materia de investigación de sospechosos.
A partir de este proyecto, con media sanción de Diputados y hasta allí sin objeciones del massismo, comenzaron los fuertes reclamos de los renovadores y de incluso algunos oficialistas que NO COMPARTEN una ley donde las policías municipales, según su mirada, estarán demasiado acotadas para el desarrollo de su trabajo profesional.
No es fácil el camino que le queda hasta el próximo miércoles a Mariotto y Fioramonti. Necesitan 22 votos si no quieren perder frente al massismo. Todavía no hay certezas. No esta claro si terminará primando el mayo optimismo de los legisladores o el escepticismo de los colaboradores de Granados.
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