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viernes, 29 de marzo de 2024 |
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Suma y sigue
Carta Abierta dice que no es su candidato. Responde desde la ironía de Marangoni y el apoyo explícito de Maurice Closs. Daniel Scioli y el armado diario de su estructura nacional.
Por un lado el misionero Closs dijo que el Gobernador de Buenos Aires es "su candidato" para el año que viene e imagina " ser parte de su futuro gabinete". Por el otro, Carta Abierta transparentó lo que piensa y dice parte de la intelectualidad kirchnerista : "Nosotros no votamos a Scioli. No es nuestro candidato":
No es demasiado común lo que pasó con Ricardo Forster y Eduardo Jozami. Generalmente se opina o debate mas sobre ideas o programas que en torno a nombres propios. Es mas, los mismos que declaran resistir a Scioli dice que discutieron internamente mucho sobre si mencionar o no nombres propios. La única respuesta desde el movimiento naranja corrió por cuenta de la ironía de Gustavo Marangoni, titular del Banco Provincia: "No voy a poder dormir luego de leer lo dicho por Carta Abierta"
Pueden ser muy lícitos y entendibles los posicionamientos de Forster, Jozami y demás. Pero dentro del mismo grupo saben que tampoco es demasiado convocante señalar que no están con Scioli porque la alternativa es Sergio Urribarri. El entrerriano ha sido muy critico del bonaerense pero no es una figura que por historia y presente despierte demasiadas pasiones.
En los armados futuros, sin embargo, las cuestiones escenciales pasan por otro lado. Mientras estos debates se agotan pronto, Daniel Scioli sigue impertérrito su búsqueda de apoyos provinciales. Cómo ahora fue el turno de Closs, antes se expresaron explícitamente en el mismo sentido Francisco Pérez (Mendoza) y Martín Buzzi (Chubut). De manera menos expresiva pero también muy cerca de su candidatura se manifestaron ya Luis Beder Herrera (La Rioja), José Luis Gioja (San Juan), Lucía Corpacci (Catamarca) y Eduardo Fellner (Jujuy).
A este esquema se deben agregar otras voces muy oficialistas cómo las de Diana Conti o Miguel Pichetto que respaldan la candidatura de DOS. El cristinismo mas militante, en tanto, mas allá de los acercamientos de Eduardo De Pedro al sciolismo, sigue insistiendo en la búsqueda de otro candidato mas cercano a sus afectos politicos. La recorrida va desde Urribarri a Randazzo pasando por Dominguez y Kicillof . Para la última hipótesis la Economía debería tener en los próximos meses un grado de recuperación tal que hoy nadie lo considera posible. Dos datos de los últimos dias que también tienen relevancia: Los grupos Electroingeniería y Szpolsky crecieron estos años con un explícito apoyo al kirchnerismo. Hoy empero varios de sus referentes están alineados con Daniel Scioli cómo garante de continuidad.
Cualquier búsqueda es legítima. El tema es encontrar con quién poder dar la pelea. Y esto no es nuevo en el kirchnerismo. Nunca lo quisieron demasiado a Scioli y sin embargo en el 2007 hubo que recurrir a él cómo la única alternativa de triunfo en Buenos Aires. Los candidatos amigos, los que estaban mas cerca de los afectos ( y midieron a varios) nunca llegaron a los dos dígitos en intención de voto.
Ahora se puede estar atravesando una situación muy similar. Es entendible que desde el oficialismo mas militante se busque un candidato mas cercano. La pregunta es ¿ Hay tiempo para poder competir contra toda la estructura que pacientemente fue armando Scioli en los últimos meses? En verdad, parece muy complicado. El hombre de la ilusión naranja tiene una imagen y un conocimiento nacional muy por encima de cualquiera de sus competidores, un semiguiño de la conducción oficial elegida hace unos dias en Parque Norte y un cordón de apoyo de Gobernadores del PJ que crece un poco todas las semanas. Cómo capital político no es poco . Escencialmente se presenta cómo un armado MUY DIFÍCIL DE ENFRENTAR a nivel electoral en las primarias. Con estructura propia en Buenos Aires y adherentes en el resto de las provincias pareciera que enfrentarlo y ganarle hoy es una tarea para elegidos. Las situaciones electorales nunca se congelan, pero los tiempos se acortan y Daniel Scioli sigue apareciendo cómo el mejor armado y menos improvisado para la pelea.
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