sábado, 31 de mayo de 2025
   
 
3/4/2025
     
Derrota cantada

Con una particular capacidad para autoinfligirse lesiones, el oficialismo insistió con los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García Mansilla para designarlos en la Corte Suprema de Justicia y ambos recibieron un contundente rechazo. 43 votos en contra del actual Juez Federal y 51 para el ex decano de la Universidad Austral. Lo singular de la situación fue la insistencia del Ejecutivo en persistir en el error. Cristina Fernández de Kirchner, Mauricio Macri y Alberto Fernández postularon en su momento distintos candidatos para la Procuración o el máximo tribunal y ante la falta de respaldo optaron por el retiro de los pliegos. Acá en cambio se persistió de manera inexplicable hasta el resultado de hoy, donde la votación masiva comprendió casi todos los bloques y el desgaste político del Gobierno y los propios involucrados resulta muy alto. Es particularmente complicada la situación de García Mansilla, que integra la Corte con fecha de vencimiento en noviembre por su designación en comisión pero con su pliego rechazado masivamente en la jornada del jueves. Ni el propio oficialismo descartaba anoche la posibilidad de su renuncia.

   Nunca fue lo que el Gobierno dijo que era.  A mediados del año pasado,  Ariel Lijo y Manuel García fueron propuestos para integrar la Corte Suprema. El primero porque cerraba con el peronismo por sus múltiples vínculos con todos los sectores, particularmente los gobernadores. García Mansilla por su afinidad ideológica con los libertarios y especialmente por su posición contraria al aborto.  Le adjudicaron a Ricardo Lorenzetti la paternidad de la idea indicando que, si se concretaba, podía recuperar la presidencia del máximo tribunal dejando en minoria a sus enemigos Rosatti y Rosenkrantz. Parte de la negociación era también un acuerdo mayor con el PJ dónde se discutiría la imprescindible designación de una mujer, la cantidad de miembros  de la Corte y el nombramiento de otros cartgos clave cómo el Procurador y jueces y camaristas varios con vacancias muy prolongadas.

   Durante todo este tiempo jamás se avanzó. El kirchnerismo a través de allegados a CFK  y el propio José Mayans siempre dijeron que nunca se había habilitado alguna negociación. Parecía un modo de preservar el diálogo pero termina siendo cierto. Difícil de entender al oficialismo; si  necesitás dos tercios de los votos para aprobar los pliegos, apenas tenés un puñado propio de senadores y así todo no habilitás ninguna negociación el resultado es muy previsible. Desde la semana pasada se había que el  final estaba cantado. El radical correntino Vischi, muy cercano al Gobernador Valdéz y de mucho diálogo con Santiago Caputo habló varias veces intentando lo lógico: retirar los pliegos  y evitar el escenario de derrota. Nunca lo escucharon.

  Ariel Lijo tuvo 43 votos en contra: 24 de Unión por la Patria, 10 de la UCR, 7 del PRO, 1 de Francisco Paoltroni,  el formoseño particularmente enfrentado con el candidato por la cercanía de este con Gildo Insfran y la cordobesa  Alejandra Vigo, esposa del ex Gobernador Schiaretti. El "cordobesismo" evita confrontar de manera frontal con Javier Milei pero en este tema puntual la diferencias son contundentes desde la designación por decreto y juramento en la Corte de García Mansilla. Los 7 votos en contra del PRO son otro dato. Es cierto que  pocos escucharon la orden de Macri de facilitar el quórum, pero este voto alejado del oficialismo es también un reflejo claro de cómo se multiplican diferencias entre el PRO y LLA.

   La votación contra García Mansilla, 51 rechazos, tuvo mayor contundencia que la de Lijo puesto que no  lo acompañó un grupo de integrantes de Unión por la Patria que votó a favor del Juez Federal.