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| miércoles, 15 de enero de 2025 |
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Fragmentación
Javier Milei deberá convivir con una Cámara de Diputados atomizada cómo nunca en los últimos cuarenta años. Divisiones en la UCR, salida de la CC de JxC, el PRO fracturado hoy con la decisión de Pichetto, Monzó, López Murphy y otros de conformar espacio propio, los bloques provinciales, la izquierda y un peronismo de compleja convivencia interna. El dato tiene un aspecto positivo para LLA porque no hay unidad opositora pero también los
obligará a negociaciones múltiples, siempre costosas en lo político y económico. Todos apuestan a un Congreso decisivo a partir de la Ley Omnibus que prepara el futuro oficialismo. También está el otro camino, que el futuro Presidente, conocedor de las limitaciones numéricas de su propio bloque trate de esquivarlo lo máximo posible.
Milei afrontará su primera etapa de Sesiones Extraordinarias con menos de 40 diputados propios pero con una oposición dividida cómo nunca antes. Apriori el dato no es malo. No tendrá enfrente ningún gigante capáz de frenar proyectos o avanzar con iniciativas propias. Salvo grandes acuerdos opositores tampoco parece viable hoy la convocatoria a sesiones especiales para imponerle el temario y tratambiento de leyes rechazadas por el oficialismo. El costado complejo es que deberá multiplicarse para ir cerrando acuerdos con cada uno de esos pequeños islotes. La gimnasia es trabajosa y estará plagada de reclamos. Nadie te da algo por nada. Todos piden, todos reclaman. Dinámica clásica del Congreso pero dónde hastá acá no hay ningún expertise por parte del nuevo oficialismo. La enorme mayoría de los recién llegados estarán descubriendo está manera de negociar a partir del juramento de mañana.
El Presidente tiene empero otro valor agregado que va mucho más allá de los números. Javier Milei tendrá un tiempo determinado un elevado nivel de consenso social. Mientras esto se sostenga, todo es menos complicado en el recinto. Ni oficialistas ni opositores están al margen de lo que se vive puertas afuera del Palacio.
No hay análisis u opinión de legislador que diga que el "Congreso será clave". Puede ser. Y si es así mejor. Llegarán leyes decisivas y la idea es avanzar rápido. Tal vez montado en el sólido respaldo del 55 % se pueda avanzar en muchas leyes con respaldo parlamentario. Después de todo, en un universo de 257 diputados está claro que los opositores votados y elegidos para esa función son 113. 108 de Unión por la Patria y 5 del FDT. Quedan 144 y el quórum se logra con 129. No será sencillo pero tampoco es imposible. Efectivamente, podría haber respaldos para determinadas leyes y rechazo a otras.
Es el mejor escenario posible, no el único. Desde el 83 hasta acá -algunos más, otros menos- todos los mandatarios recurrieron a los Decretos de Necesidad y Urgencia. Es cierto también que luego tienen que ser convalidados por una de las dós Cámaras y la LLA es un certificado de austeridad a un lado y otro de Pasos Perdidos, pero sería muy osado pensar hoy que este camino no integrá el menú de opciones que imagina Javier Milei-
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