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| miércoles, 24 de abril de 2024 |
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Sin reunión
Se suspendió la semana pasada y estaba anunciada para hoy. Finalmente ayer lunes a la tarde quedó descartada la prevista reunión entre el Ministro de Economía y gobernadores y jefes de bloque de Juntos por el Cambio. Las múltiples internas en el oficialismo y la oposición más los encuentros del canciller Cafiero hoy martes y el previsible ruidoso rechazo opositor hacían languidecer el encuentro desde el pasado viernes. Costos políticos. Agendas postergadas.
La idea de juntar a Martín Guzmán con los cuatro gobernadores opositores que no asistieron a la invitación del Ejecutivo de los primeros dias del año se aceleró a partir de las declaraciones de Gerardo Guzmán: "El acuerdo con el FMI lo firmamos nosotros. Por lo tanto me parece lógico escuchar lo que el Gobierno tiene para decir" El diálogo con Sergio Massa fue muy rápido y quedaron en principio para la semana pasada. Entre los primeros tironeos en ambos sectores y un contacto estrecho del titular de Diputados se postergó todo para esta semana. Demasiado tiempo. La reunión había empezado a romperse desde el primer anuncio.
Los cuestionamientos para el Gobernador de Jujuy fueron brutales. Básicamente desde el ala radical del PRO y algunos medios. Martín Guzmán por su parte tampoco se mostró nunca demasiado convencido. Uno de los detalles que rápido marcó diferencias fue elegir el Ministerio para el encuentro mientras la oposición reclamaba, por cuestiones de institucionalidad, las oficinas del Congreso. Patricia Bullrich y varios otros opositores solicitan además números muy puntuales y programas de gestión que, con la negociación en marcha, Economía por ahora no muestra ni debate.
El frustrado encuentro priva al Gobierno de una foto con jefes opositores y no es la primera vez que ocurre en esta compleja negociación. Antes tampoco hubo Presupuesto y menos plan Plurianual. Sin embargo también de este modo se evita otra posibilidad: una oposición hipercrítica al terminar la reunión -escenario más que posible- en el medio de los encuentros de Santiago Cafiero con el canciller americano y la titular de la Cámara de Diputados.
Más allá de los cálculos coyunturales, el frustrado encuentro es el natural reflejo de este momento en ambas coaliciones. En el oficialismo se apostó desde el vamos a un acuerdo con el FMI a 20 años y sin ajuste. Con esos escenarios descartados no está claro cuántos y quienes son los decididos a seguir avanzando con las negociaciones. No acordar con el FMI puede ser más que problemático para la gestión del Gobierno durante los próximos dos años, pero también están muy claros los costos políticos, sociales y económicos de cualquier acuerdo que profundica la recesión y el ajuste.
En JxC hay un grupo muy importante que dice "Si al acuerdo" No tienen demasiado margen para mostrarse cerca del FDT pero rechazan cualquier salto al vacío, se imaginan volviendo en dos años y por lo tanto reclaman el mayor ordenamiento posible. No es unánime la postura. Otros apuestan al fracaso. Porque no hay acuerdo o el acuerdo sólo significa mayor demanda social. Indican que es el escenario necesario para hacer lo que antes no pudieron o no quisieron. En este marco, ninguna reunión podía salir bien.
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