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| jueves, 25 de abril de 2024 |
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Sin juego
Nadie esperaba el portazo. Problemas de posicionamiento. Relación con Massa y Felipe Solá. Reunión de Hugo y Alberto Fernández el fin de semana para delimitar responsabilidades. Los diputados que vienen. Herencia. La Cámpora.
Parecería imposible no asociar la intempestiva renuncia cómo diputado del hijo del principal dirigente gremial con un crisis de mayor intensidad entre el Gobierno y su padre. No parece tan lineal. Desde ambos sectores indican que el Presidente y Hugo Moyano almorzaron juntos el sábado en un encuentro que duró cinco horas con dos objetivos de mínima: anticipar la dimisión y evitar que complique lo que es hasta ahora un muy buen vínculo entre ambos, dónde al Gobierno lo que menos le interesa es tensar la relación con el representante gremial de mayor capacidad de movilización.
Facundo Moyano, cómo otras y otros, llegó al Congreso hace más de diez años a través de caminos mucho mas cortos que la mayoría a partir del peso político de Hugo. En sus inicios intentó algún acercamiento desde la Juventud Sindical que encabezaba con La Cámpor de Máximo Kirchner, de reciente creación en ese momento. El posterior alejamiento entre CFK y el jefe camionero hizo pasar al olvido aquella primera cercanía. Los últimos años lo tuvieron muy cerca de Sergio Massa y de Felipe Sola, lo que hace mas sorpresiva la decisión.
Hay explicaciones sin embargo, básicamente desde lo parlamentario y político. En una Cámara de Diputados donde el oficialismo no tiene quorum propio se ha optado por trabajar con aliados y parte de la oposición en muy contados proyectos, acordados por el presidente de la Cámara y el Jefe de Bloque, con escasa o nula participación para los demás. En el listado aparece el alivio en Ganancias para los trabajadores, muy sostenido por los gremios con mejores salarios, y el Aporte Solidario por única vez o "Impuesto" a la Riqueza. El resto de la agenda ha tenido que ver con cuestiones institucionales y derechos de minorías y niños, más alejada de los intereses específicos de Moyano. Por ejemplo intentó avanzar con un proyecto para estatizar las empresas de peaje pero nunca avanzó demasiado en la agenda del Bloque y recibió además los rápidos reparos de trabajadores viales cercanos a La Cámpora.
El armado de listas para setiembre y noviembre tampoco le dió alegrias. Por Buenos Aires los candidatos son Sergio Palazzo, Hugo Yasky, Vanesa Siley y Walter Correa (Bancarios, docentes, Judiciales y Curtidores en ese orden) Ninguno de ellos está directamente alineado con la CGT de Héctor Daer o Camioneros. Por acá puede estar la síntesis. Lo que viene cómo discusión gremial no lo tendrá entre sus interlocutores elegidos, los proyectos que pretendió impulsar naufragaron cómo tantos y tampoco es decisivo desde su banca en los otros problemas extra gremiales -OCA, causas judiciales, Independiente- de Moyano padre. Sin confirmar demasiado se indicó que muy posiblemente apueste a regresar a su gremio de origen: Sindicato de Empleados de Peaje. La crónica de sus desavenencias es real, pero también hay que decir que para centenares de diputados y diputadas la situación es la misma y ninguno renuncia a nada.
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